Les queremos compartir una canción en honor de Juan Pablo II, ilustrada por un sencillo video.
Quiere ser un humilde homenaje a la vida y la obra de alguien que marcó profundamente la fe de muchos de nosotros. Aún su ejemplo y su enseñanza siguen iluminando el camino de la Nueva Evangelización, la defensa de la dignidad de la persona humana desde la concepción hasta la muerte natural, el proyecto de una Iglesia de puertas y brazos abiertos, el camino aún arduo pero posible hacia la Civilización del Amor...
Es también nuestra manera de levantar la bandera de esta esperanza inclaudicable, alimentada en el amor de Cristo y su victoria sobre el odio y sobre la muerte.
Al Dios del amor: gracias por la vida de Juan Pablo II. A Juan Pablo II: gracias por ser testigo, entre nosotros, del Dios del amor.
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